Cindy Lima, la princesa de la selección

Por Pere Ferreres (http://www.basketconfidencial.com/)

Tiene nombre de tormenta tropical: Cindy. Hay gente que le dice ‘Crawford’, y los que le tienen más confianza, ‘Negra’ y ‘Chocolate’. Su padre era angoleño y la madre es cubana. Tercera de cinco hermanas (Kenya, Vanesa, Cindy, Niurka y Karem), le pusieron Cindy por Cinderela, la Cenicienta. Le gusta que la traten como a una princesa.
Cindy Orquídea Lima García (Barcelona, 1981) vuelve a la selección española de baloncesto que tiene que afrontar el próximo Eurobasket de Italia, del 24 de septiembre al 5 de octubre.Si el equipo del Cadí la Seu fichó un día a la pívot lituana Kristina Vengryte, una jugadora que compagina el deporte con el oficio de modelo, Cindy Lima también conoció el mundo de la pasarela: fue un tiempo en el que decidió dejar el baloncesto y se fue a París a buscarse la vida. Trabajó en una agencia de modelos.
Un día, decidió que quería volver a jugar y se fue a Italia. De Verona a La Laguna (Tenerife), Madeira (Portugal), Vigo, Zaragoza, y ahora acaba de firmar dos años con el León.Antes de perder el mundo de vista, Cindy jugaba en el Universitari, de Barcelona. Con 12 años la convencieron para jugar. “El baloncesto es como una secta: saben que hay una niña altita y van a por ella”. Cindy reconoce que era una tarambana y que el deporte le sirvió para centrarse. Jugó en el Inmaculada Horta, en el Siglo XXI y en el Santa Rosa de Lima, antes de fichar por el ‘Uni’. Ganó la medalla de oro en el Europeo júnior de Turquía.Cindy Lima y Marta Fernández eran las grandes promesas.
A Cindy le faltó ambición.Cuando dejó el baloncesto, las víboras comentaban si se habría implicado en negocios poco transparentes. “Me llamaban las amigas y me preguntaban si era verdad que me perseguía la mafia. ¡Yo me partía!”. Cindy Lima tiene la sensación de escapismo muy asimilada, pero se muestra orgullosa de haber conocido países, idiomas y culturas diferentes. “Necesito 20 segundos para encontrarme como en casa”.
La vida de las Lima es muy intensa. Cindy celebra que haya estado así, porque ahora sabe sacarse las castañas del fuego. Es una mujer independiente, impulsiva, espontánea, vitalista. Ha estudiado Cine y Realización, le gusta la decoración y la pintura. “Cuesta mucho sacarse la mala fama, pero afronto el futuro con entusiasmo”, me dijo hace un par de años, cuando inició la aventura aragonesa.
Durante mucho tiempo, en la selección española se cometió una grave injusticia con ella. La ignoraban. Alguien le hacía pagar una factura que no le correspondía. Ha tenido que llegar un nuevo seleccionador, Evaristo Pérez, para que se repare la injusticia. Cindy Lima ha vuelto a la selección.
“Soy Evaristo, el rey de la baraja
vivo entre rejas, antes era chapista
los mercaderes ocuparon mi templo
y me aplicaron la ley antiterrorista”

Es el estribillo de un tema de rock transgresivo, 'Jesucristo García', del grupo Extremoduro. Esa canción explica que al seleccionador, Evaristo Pérez, en el mundo del baloncesto se le conozca por 'El rey de la baraja'.El titular fácil es: “El rey de la baraja llama a la princesa”.
Lo importante es que Cindy vuelve a una selección que no debió dejar de llamarla nunca y que le permite volver a soñar que será una jugadora decisiva, que marcará la diferencia.Cindy Lima dice que le gustaría que la siguieran tratando como a una princesa, pero hace tiempo que decidió dejar la pasarela para convertirse en las pistas en una jugadora modelo.
¡Toda la suerte del mundo en Italia, princesa!